Actualizado el 20 septiembre, 2023
Los mayas fueron una civilización ancestral prehispánica que dominó un vasto territorio, su organización política y social fue una estrategia que brindó buenos resultados. Descubre todo sobre la organización política de los Mayas, en este artículo.
Introducción a los Mayas
Los Mayas constituyeron una civilización prehispánica que logró convertirse en uno de los mayores imperios en la América Precolombina, sin embargo y a pesar de su estrategia política, su civilización fue afectada por causas que provocaron su fin antes de la época colonial.
La civilización Maya dejó suficientes antecedentes y testimonios de haber sido una cultura que logró avances importantes en el aspecto económico, cultural, social y político.
En este artículo realizaremos un viaje panorámico para conocer sobre los mayas y adentrarnos en su organización política y social.
Los grandes avances de esta civilización estuvieron fundamentados en la observación astronómica, la cual les permitió asentar las bases de la sociedad e implementar las estrategias que los facultaron para mantener un gran imperio.
Lograron desarrollar un calendario lunar y un calendario solar, a pesar de no haber desarrollado un escritura, existen los Códices Mayas, los cuales son manuscritos que permiten conocer sobre su estructura religiosa.
Estos documentos contienen la información más antigua conocida acerca de la civilización Maya, en donde es posible conocer sobre actividades como la cacería, las siembras, los tiempos de lluvia, sequía y más.
Esta información era grabada en piedra, en monumentos y frescos pintados en papel amate, el cual era elaborado a partir de una fibra vegetal.
Al comienzo la economía del Imperio Maya era muy simple, se basaba en el trueque o intercambio, no obstante, en la medida que el imperio crecía y se expandía conquistando nuevos territorios, las necesidades comenzaron a ser mayores y debieron diversificarse los trabajos, lo que dio inicio a la división de clases sociales.
La agricultura era la base económica y se sustentaba en la preparación de las tierras aplicando la desforestación y quema, la cual servía para alcalinizar los suelos y hacerlos más fértiles.
En un principio la organización de la cultura Maya era tribal, es decir, la base fundamental era la familia que se establecía en un mismo territorio y compartía lenguaje y cultura.
Con la expansión del imperio fueron aceptando personas de otras regiones, lo que contribuyó al desarrollo de la cultura y la diversificación de cultivos.
De esta manera comienzan a desarrollarse también las llamadas ciudades estados, las cuales eran gobernadas por una clase élite, lo que originó la jerarquización social de la que hablaremos con detalle más adelante.
Los mayas eran grandes arquitectos, lograron construir ciudades, templos y monumentos que perduran hasta nuestros días. Además perfeccionaron el arte de la pintura y la escultura. Fueron grandes observadores y lograron comprender en detalle la astronomía, creando varios calendarios Maya, los más increíbles, sofisticados y precisos de las civilizaciones prehispánicas.
Su religión era politeísta, lo que quiere decir que creían en varios Dioses, a los que veneraban, adoraban y ofrecían sacrificios. También creían en la vida después de la muerte, bajo la concepción de que la vida de la humanidad era cíclica.
Según sus historias, leyendas y mitos ya la vida humana se había creado al menos 5 veces y se habían destruido 4, por eso eran grandes estudiosos del tiempo.
Entre los dioses más venerados se encuentran Hunab Ku, quien era el Dios creador. El Dios de la lluvia llamado Chac y el Dios del cultivo del maíz de nombre Yun Kaax. Como podemos apreciar, sus dioses estaban asociados a la vida, la prosperidad y la naturaleza.
La religión y las ceremonias eran multitudinarias, en ellas brindaban ofrendas a los dioses para obtener una buena cosecha o pedían para que lloviera, entre otros rituales.
Hasta hace muy poco solo existían hipótesis de la razón sobre la desaparición del imperio Maya, una de esas hipótesis señalaba una época de sequía que deterioró las tierras y sus cultivos, base fundamental de la economía Maya.
Esto trajo períodos de hambruna, miseria y en consecuencia se generaron guerras internas que llevaron al fin del imperio Maya. A finales del siglo VIII hasta el siglo IX comenzaron a ser abandonadas las grandes ciudades y a la llegada de los españoles al territorio Maya, ya no quedaba nada del majestuoso imperio.
Estudios realizados por investigadores de la Universidad Rise de Houston en Estados Unidos, confirmaron la hipótesis, lograron demostrar que las sequías, las hambrunas y disturbios entre ciudades estados, acabaron extinguiendo a la civilización Maya.
Para ello analizaron el fondo del Gran Agujero Azul en Belice, en donde tomaron muestras de sedimentos que sirvieron para comprobar que efectivamente hubo una gran sequía entre los años 800 y 900 después de Cristo.
Esto produjo la migración de los Mayas hacia el norte de México, posteriormente hubo otro período de sequía que coincide con la depresión de la gran ciudad Maya construida en tierras mexicanas. Confirmando de esta manera la hipótesis sobre la extinción producida por un período de sequía prolongado.
Razón por la que estaban divididos
Para poder entender sobre la cultura Maya es necesario ubicarnos en las épocas que marcaron a la civilización, durante las cuales vivió sus mejores momentos, a partir del año 200 y hasta el año 900 después de Cristo, conocida como la época del Clásico Maya.
Luego, el período pos-clásico se presenta del año 900 al año 1521 después de Cristo. Pero a partir del año 700 comenzó un declive de la civilización marcado por una crisis prolongada, que diezmó su poderío hasta la llegada de los españoles al territorio de Yucatán en el año 1527 después de Cristo.
Encontraron a un pueblo aguerrido, pero sumamente disminuido por enfermedades, hambrunas y guerras que se mantuvieron por largo tiempo, lo que facilitó la colonización.
La expansión del Imperio fue de verdad impresionante, lograron establecerse en las extensas mesetas y bosques tropicales de la península de Yucatán, estados que hoy forman parte del actual territorio de México, así como en Guatemala, Belice y Honduras.
Como podemos notar, abarcaron un territorio de aproximadamente 28.000 km², de modo que los mayas no podían mantener un Estado ni un poder político centralizado, por ello debieron crear una estrategia para mantener control en este vasto territorio.
Es así como en el período del pos-clásico los mayas estuvieron divididos en múltiples ciudades estados, donde cada uno era dirigido por una familia noble.
Las batallas y enfrentamientos internos eran frecuentes sin embargo la caída de Chichén Itzá, el principal centro de poder de los Mayas establecido en Yucatán para el principio del período pos-clásico, fue el inicio de la supremacía de Mayapán la cual se mantuvo hasta 1450, logrando dominar una gran cantidad de ciudades estados, utilizando para ello una red de alianzas consanguíneas y matrimoniales.
Entonces comienza a construirse una estructura social y política en donde los agentes de poder y los miembros importantes de las familias vivían en Mayapán, lo que de alguna manera obligaba la lealtad de las noblezas de las ciudades estado.
En Mayapán se encuentra la residencia del Rey emperador llamado Halach Uinic, quien tenía las atribuciones de dirigir la política del Imperio, las relaciones exteriores y era también la máxima autoridad religiosa.
Esta organización política de los Mayas mantenía centralizado el poder en las grandes ciudades y desde allí se dirigían los lineamientos hacia las ciudades estados, de esta manera podían tener el control del vasto territorio que ostentaba el imperio, siendo esta la razón de que se mantuvieran divididos.
Organización política de los Mayas
Como indicamos anteriormente, en la civilización Maya existe como máxima figura el Rey Emperador, que se encontraba residenciado en la ciudad central Maya.
Luego, un nivel inmediatamente inferior estaba ocupado por los funcionarios de justicia y los miembros que se encargaban de asegurar que los campesinos cancelaran los tributos, además de mantener el orden en las actividades que se desarrollaban en las ciudades estados.
Era fácilmente distinguible una organización jerárquica, ya que por debajo del sacerdocio o administradores de justicia se encontraban los plebeyos y por último los esclavos.
En cuanto a la nobleza o élite de los Mayas, estaba conformada por las familias de aquellos jefes locales que se encargaban de gobernar las ciudades estados, también se incluían en esta clase social a los miembros del consejo, el cual estaba conformado por personas que asesoraban al Rey y a los altos funcionarios.
El nivel que corresponde a los plebeyos en la organización política de los Mayas se encontraba conformado en su mayoría por los campesinos, quienes se encargaban de los cultivos, su mantenimiento y cosecha, ellos era de gran importancia ya que la agricultura era la base de la economía del imperio.
También en este nivel se encontraban las personas que tenían algún oficio, como los alfareros, tejedores, constructores, entre otros. Este nivel jerárquico de la civilización Maya producía lo necesario para mantener a la clase social alta.
Además eran los encargados de la construcción de los centros ceremoniales y las caminerías o calzadas que unían a las grandes ciudades. Una manera muy particular de identificar la ubicación dentro de esta clase social, la dictaminaba la distancia que había entre la vivienda de la persona y la plaza central de la ciudad, es decir, mientras más cerca más estatus.
Por último en la jerarquía de la organización de los Mayas, se encontraban los esclavos. Este nivel estaba conformado por hijos de esclavos, prisioneros de guerras y todas las personas que incurrían en un delito, así como los huérfanos de padre y madre.
Por todo lo antes expuesto resulta evidente que la organización social de los Mayas era jerarquizada, su estructura estaba definida por cada ciudad-estado que funcionaba como la máxima autoridad y además era una monarquía por su carácter hereditario.
La nobleza Maya era llamada “Almehenoob”, de ella surgían los gobernantes mayas “halach-uinic”, sus parientes directos compartían con el Jefe del clan el lugar más alto de la pirámide social maya.
En realidad no llegaron a conformar un imperio unificado y por ello las continuas batallas de poder y territorio, porque cada ciudad maya era un núcleo político, social y por supuesto religioso.
Organización social de los Mayas
Hemos establecido que la civilización Maya se caracteriza por tener una estructura social perfectamente dividida en clases sociales, a groso modo se identifica una clase de nobles, los administradores de justicia, los campesinos y los esclavos.
Sin embargo, dentro de la clases sociales podemos identificar otros grupos que las conforman y que permiten dividir de una manera más detallada la jerarquía social y política de los Mayas, la cual es identificada por el rol que ejecuta cada uno de estos grupos en la sociedad.
En este sentido, la clase noble estaba conformada por el Rey Emperador y su familia, quienes obtenían este rango y privilegio por ser familia directa del Rey, este nivel era acompañado muy de cerca por los sacerdotes, administradores de justicia y los militares.
En la clase social de los plebeyos se encontraban todos los hombres de oficio, por ello se pueden identificar grupos de artesanos, campesinos, constructores, hilanderos o tejedores, pero también formaban parte de esta clase social los comerciantes.
Por último estaban los esclavos, el nivel más bajo de la pirámide social Maya. Esta podía ser una condición de nacimiento cuando se era hijo de esclavos o adquirirla al ser capturado en batalla, esta era una de las estrategias más utilizadas para poder mantener este nivel social, debido a que el trabajo pesada diezmaba con facilidad a este grupo.
Dentro de la organización política de los Mayas, la figura del rey concentraba todos los poderes políticos, religiosos, militares y civiles; era él quien elegía a los jefes locales, los cuales eran seleccionados en la clase social conformada por los nobles o “batabs”, en idioma Maya.
La confianza y credibilidad eran requisitos indispensables para ser seleccionado, ya que sobre este jefe recaía la responsabilidad del orden público y el cobro de tributo que pagaban los plebeyos para mantener al imperio.
Rasgos que conservan actualmente
Con la llegada de los españoles, los Mayas ofrecieron resistencia, sin embargo fueron controlados y la principal razón se debe a que en ese momento el imperio se encontraba muy disminuido en fuerzas militares.
En segundo lugar podemos mencionar que la estrategia utilizada para expandirse territorialmente les jugó en contra al momento de defenderse porque no actuaban como un solo bloque Maya, sino como grupos Maya, lo que facilitó el control por parte de los españoles.
Como muchos otros grupos étnicos, los mayas fueron coaccionados y obligados a asumir de alguna manera la cultura occidental, no obstante, esta cultura actualmente conserva muchas de sus tradiciones ancestrales.
Por supuesto que han sufrido mestizaje a través de siglos de conquista y lucha, pero a pesar de ello se identifican como mayas especialmente en los estados de Yucatán, Quintana Roo, Tabasco y Chiapas.
Por ejemplo Mérida, que es la capital de Yucatán y una de las ciudades más importantes del sureste de México, tiene una sociedad mestiza que es orgullosamente descendiente Maya y si se observa a los pobladores de las otras ciudades en donde se hacen presentes, la realidad es que no existen grandes diferencias.
Estos grupos todavía mantienen una economía basada en la agricultura, la artesanía, la pesca y la alfarería, como hicieron antes sus ancestros. Con respecto a la religión los mayas de Tabasco aceptan ser creyentes de Dios, lo que los acerca a la religión católica. Sin embargo, mantienen costumbres y rituales ancestrales que mezclan lo mítico con lo religioso.
Esta tendencia religiosa es más acentuada en el Quintana Roo, donde se rinde culto a dioses prehispánicos como Chaac, que es el dios de la lluvia y al igual que sus ancestros, hacen hermosas ceremonias pidiéndole lluvias abundantes para obtener buenas cosechas.
También mantienen la tradición de curarse con hierbas y en sus grupos existen curanderos que les quitan el mal de ojos o la envidia, los partos son atendidos por comadronas y hay asesores llamados “grandes maestros”, que los aconsejan en la solución de sus problemas. Como podemos notar se mantiene mucho de la cultura, costumbres y tradiciones ancestrales.
Pero eso no es todo, además ha trascendido el estilo de sus casas, en cuyo interior usan el comal que consiste en una pieza de barro para cocinar, al igual que su milpa, un agroecosistema que cuidan con celo porque en él mantienen sus semillas; finalmente la música y los instrumentos elaborados con caparazones y huesos también forman parte de su cultura.
Quizá los españoles conquistaron un territorio, pero como podemos corroborar, nunca llegaron a conquistar la dignidad y el corazón de los Mayas.
¿Quién asesoraba al Rey Maya?
En la cima de la organización política de los Mayas, el Rey Maya o también llamado Gran Señor, era responsable de las estrategias de la política interior y exterior, así como de elaborar las leyes, organizar las redes de comercio, administrar la justicia y más.
Ante una responsabilidad tan amplia, es evidente que ameritaba una ayuda y asesoría organizada, que le permitiera mantener el pueblo y ganar guerras. Por lo tanto, el Rey contaba con un grupo de asesores, que era llamado Gran Consejo.
Este Gran Consejo estaba constituido por los principales jefes de las diferentes aldeas que conformaban la ciudad estado y también por los sacerdotes. Ellos eran los encargados de ayudar en la toma de decisiones y estrategias de guerra, que permitieran mantener en óptimas condiciones el imperio Maya.
Cabe añadir, que actualmente esta organización busca tomar el sitial que permita influir en el desarrollo cultural y social de aquellos estados en donde exista una población Maya, haciendo valer su derecho ancestral y así cumplir la Ley de Derecho, Organización y Cultura Indígena, en México.
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