Actualizado el 15 junio, 2018
Los Tacuate son una etnia indígena que aún conserva sus tradiciones manteniendo el idioma original de su tribu, el cual desciende directamente de los Mixtecos. A pesar de mantener la misma lengua, conservan una identidad étnica muy distinta a la del pueblo Mixteco. (Ver Articulo: Siona)
Se cree que la palabra “Tacuate” desciende del vocabulario Náhuatl “tlacoalt” (tlal = tierra; coalt = serpiente), pero se cree que debido a la incapacidad de pronunciación por parte de la clase mestiza, los comenzaron a llamar tacuates.
Ubicación
Los Tacuate habitan únicamente en el municipio Santa Maria Zacatepec (distrito Putla), en la región de la Mixteca de la Costa de Oaxaca.
Hay quienes señalan que existen habitantes Tacuate en otras regiones, como el municipio Santiago Ixtayutla, Jamitepec, Oaxaca. Estos son considerados como una misma etnia por distintos autores debido a que conservan un mismo lenguaje y similitudes al pueblo Tacuate.
Aunque hay otros que denominan como integrantes de esta tribu únicamente a los habitantes en Zacatepec, estos son los únicos que realmente se hacen llamar Tacuates y que son denominados así por los demás grupos indígenas de la región (mixtecos, amuzgos y mestizos).
Quizás esta se la teoría más acertada, además que existe una gran diferencia entre el idioma mixteco de Zacatepec y el mixteco hablado en Ixtayutla, haciendo más factible que los de Zacatepec sean los únicos que deban considerarse como Tacuate.
Lengua
La lengua de los Tacuate es directamente descendiente del idioma Mixteco, al ser considerado como una variación del idioma de esta tribu, lo denominan algunos autores como “El mixteco de Zacatepec”.
Esta lengua es perteneciente al grupo mixtecano de lenguas otomangues. A los Tacuates no les gusta ser denominados o considerados como mixtecos a pesar de que su lengua es parte de ellos, a parte son los únicos que se autodenominan como únicos pertenecientes a esta tribu.
Existen otras variaciones del idioma mixteco, inclusive en el poblado vecino al de Zacatepec, pero aún se debate se deban ser considerados como Tacuates o no, esta es una temática que aún no se ha cerrado y continuará en discusión.
Vestimenta
La vestimenta que utilizan los Tacuates es llamativa y colorida , las mujeres acostumbran a utilizar los que este grupo considera como “huipil”, el cual es un traje característico de ellos, hecho en un telar y bordado con formas de animales en el pecho y la espalda, los colores pueden variar, pero siempre presentan distintas variaciones y conjuntos de colores llamativos.
Las mujeres utilizan muchos tipos de huipil, las de la tribu Amuzga generalmente utilizan uno muy sencillo, el cual es de color blanco y solo lleva algunos colores laterales (rosado, rojo, verde, azul, etc). Existen huipiles que son considerados como los más elegantes, los cuales son realizados por los Amuzgos, pueden ser de telar y bordados con diversidad de colores o de algodón coyuche que bordan con formas de animales.
El traje en los hombres de esta tribu está representado por un cotón de manta que es largo, el mismo se borda con figuras de animales en el pecho y en la espalda. Este tipo de atuendo se recoge por delante o por detrás con una faja, haciendo una especie de bolsas en las cuales suelen guardar diversidad de objetos.
Las mangas y las camisas suelen dejarse sin costuras laterales, de esta manera se deja expuesta la piel.
Debido a la pérdida de la cultura e identidad de etnia, los trajes tradicionales ya no se utiliza tanto en los hombres, hoy en día se suele apreciar esta vestimenta únicamente en los ancianos y uno que otro integrante de este grupo que desee llevarlo, pero en general lo llevan los hombres de edad avanzada.
Según investigaciones realizadas a diversos grupos indígenas, se estima que la vestimenta de los Tacuate es la única de las prehispánicas que sigue en uso hoy en día.
Gastronomía
La gastronomía de este pueblo es muy variada y característica de una tribu indígena, una de las comidas más degustadas por esta etnia son los tamales, los mismos vienen en distintas presentaciones y cada una de ellas posee un toque característico que las hace únicas.
Existen tamales de chileajo, los mismo se realizan a partir de carne que es condimentada con una salsa de chile y ajo, luego de ello es colocada sobre la masa y ambas son cocidas en conjunto.
Otra variedad de tamales muy característicos de esta tribu es la de tichinda (mejillón costeño), este tipo de tamal es hecho con salsa y tichindas (sin sacarle la concha), todo colocado sobre la masa y cocido.
También son características de esta etnia las Chicatanas (Hormigas culonas), las cuales son consideradas como un alimento muy crujiente y degustable.
La forma de prepararlas es quitándole las patas, las alas y la cabeza para prepararlas en una especie de salsa.
La barbacoa, este siempre viene acompañada de una masa característica hecha con maíz, jugo de barbacoa y chile (la cual es cocida sin dejar de mover una vez que están combinados los ingredientes), además se agrega salsa verde con aguacate y frijoles para complementar la barbacoa.
Viviendas
Las viviendas de los Tacuate es muy similar a la de muchas tribus indígenas, casi todas las viviendas que construían cada tribu, dependía principalmente de los materiales que tuvieran a la mano, es decir, lo que se encontraban en la región donde habitaban y los cuales podían aprovechar al máximo para sacar el mejor desempeño posible a las estructuras.
La estructura en general de la vivienda está construida con troncos y palos, la forma de las viviendas es redonda y el techo es hecho en forma cónica, para protegerse de las lluvias, el techo es forrado con zacate, el cual es una especie de pasto o forraje que se desarrolla en la región donde viven.
Hoy en día muchos grupos indígenas han optado por cambiar los métodos constructivos de sus ancestros por los métodos actuales, en los Tacuate no se ha visto mucho este cambio, quizás sea porque para ellos la familia es la base de su sociedad y estos se centran en crear una pertenencia a la familia y al grupo como un elemento de la vida cotidiana, de esta forma evitan la perdida de la cultura que poseen.
Los servicios públicos en las viviendas son algo escasos, no poseen todos los habitantes un sistema de drenaje o una red de distribución de agua potable por tubería.
Mitos y leyendas de los Tacuate
Una de las leyendas más relevantes que existe entre los Tacuate es de cómo se realizó la división de este grupo a lo largo del territorio en el que hoy día se encuentran.
La historia de esta tribu cuenta que hace muchos años existía un águila gigantesca la cual aterrorizaba el pueblo de los Tacuate. El águila por su gran tamaño y por la facilidad, capturaba a los habitantes para luego llevarlos a la sierra en donde habitaba y así poder comérselos.
Cuando el águila tuvo sus crías, comenzó a llevarse muchos más habitantes, sobre todo a los niños pequeños porque lo consideraba de carne tierna. Los pobladores intentaron engañar al ave con muchos métodos para que no se los llevara, uno de ellos consistía en colocarse sobre la cabeza unos chiquihuites cuando salían pero, el ave no se dejó engañar de forma alguna y se llevaba a las personas aun con estos instrumentos en la cabeza.
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Todo el pueblo se reunió para discutir la problemática encontrar una solución, ante tantas discusiones, finalmente se decidió dividir al pueblo en dos partes, una de ellas se quedaría en la localidad actual ya que no querían abandonar sus hogares y la otra mitad se iría guiada por el hijo del jefe.
Al finalizar, una mitad de los habitantes se quedó y el resto busco localidad en pueblo viejo, como el águila decidió seguir a aquella parte que se fue, tuvieron que partir nuevamente hasta que se alojaron definitivamente en Zacatepec y luego a su cerro.
Con el tiempo, la virgen María apareció y les pidió a los Tacuate que le construyeran una iglesia, pero estos no hicieron caso a la petición y solamente le construyeron una pequeña casita apresurada. Ante eventualidades la casita se quemó, ante este incidente la virgen se desilusiono de los humanos y decidió abandonarlos, hasta que llego a Juquila y decidió quedarse ahí.
Desesperados porque la virgen decidió irse, el pueblo de los Tacuate le construyo la iglesia que ella deseaba con la esperanza de que decidiera volver a su pueblo, pero la virgen nunca regreso con ellos. Hoy en día, los retratos de la virgen de Juquila muestra una pequeña quemadura en una de sus mejillas y esto se debe a lo que sucedió cuando se quemó aquella casita.
Las ruinas de la iglesia que construyeron los Tacuate aún se pueden ver en la salida de pueblo viejo Ixtayutla. Así es como se determina que el poblado de esta etnia se dividió en diversas regiones, aunque son simples creencias, tienen algo de cierto en la migración que el pueblo tuvo durante ese tiempo, aunque esto no explica por qué solo aquellos que quedaron alojados en Zacatepec son los que hoy en día se hace autodenominar como únicos Tacuate. (Ver Articulo: Piapoco)
